Viniendo a lo que tú vienes, querido lector, seguro que lo que menos te importará en este momento será saber que, además de lo que dice el titular, las ventas de libros así general también se han desinflado bastante allá por las islas niponas, concretamente hasta un 5,4% y hasta los 1,0528 billones de yenes, o lo que es lo mismo, unos 500 millones menos que el año anterior. Y menos te importará, seguro, que este sea el tercer año seguido que las ventas en el sector de las letras van bajando.
Así que vamos a lo que importa: según Oricon, agencia japonesa encargada de realizar estudios de mercado, las ventas de tomos de manga en el país del sol naciente se desplomaron en un 1,5% el pasado año 2012, abandonando la tendencia a la alza de los tres años anteriores y quedándose en unos 267 millones y medio de yenes de recaudación, 4 millones menos que en 2011.
En lo que a las efemérides de las editoriales en este terreno se refiere, encontramos que la que mejor parada ha salido en el tema del cómic japonés ha sido Shueisha, cuyo percentaje de tomos del total vendidos se perfila en un 14,5 % aun habiendo bajado un ligero 0,2% respecto al año anterior. Pequeñas subidas se han podido observar también en Kodansha y Shogakugan, con unos 0,1 y 0,5 % respectivamente.