Q-ta Minami no es una desconocida para los lectores españoles. Ponent Mon publicó con nulo éxito un tomo de historias cortas suyas titulado No toques a mi chica. Desgraciadamente, el mercado no debía estar listo para historias para chicas de tipo más maduro que el shojo adolescente y pasó desapercibido. Eso o que su fea portada y su precio algo elevado espantó a los posibles compradores. De todas formas los mangas de tipo josei siguen teniendo este problema, así que quizá no fuese ninguna de estas cosas.
Afortunadamente para la autora, en Francia tuvo algo más de tirón y han publicado varios mangas suyos entre los que se encuentra el de esta reseña, cuyo título en francés es Mademoiselle Ôishi y que narra las vivencias personales y amorosas de una chica de su tiempo. Kon Ôishi es una chica de lo más corriente. Trabaja en una oficina, es aficionada a la costura y es un poquito simple. Pero contrariamente a la típica protagonista shojo, con la que comparte clichés, también es un poco zorrita y se lía con el guaperas del trabajo. Él se divorcia y se van a vivir juntos. Pero lo que son las cosas, el guaperas no era tan perfecto como parecía, y tras obligarla a dejar el trabajo, a él lo despiden, teniendo ella que mantenerle trabajando en una mercería que está al lado de una peluquería donde trabaja un chico con el que hace amistad, aunque él está más interesado en acostarse con ella.
Éste es el comienzo de la serie, y la vida de Kon dará muchas vueltas a lo largo de los cuatro tomos. Desgraciadamente no serán tan interesantes como este prometedor comienzo perdiendo prácticamente el encanto inicial en sus últimas páginas. Y es que este tipo de historias basan su interés en sucesos rimbombantes y escandalosos o personajes con carisma, y esta obra va perdiendo ambas cosas tras el prometedor inicio. Y es que no es lo mismo enrollarte con un jeta que hacerlo con un simple, aparte de que personajes como la protagonista ya se han visto unos cuantos. Por otro lado el estilo de dibujo de Q-ta Minami es simplemente correcto: ni es una gran ilustradora ni tiene buenos fondos ni un buen trabajo con las tramas. Vamos, no es que sea horrible de leer, pero tampoco publicará algún día un libro de ilustraciones.
Entonces, con todo lo dicho, ¿cuál sería el interés de leer este manga? Aunque el resto de tomos no sean tan interesantes como el primero, sí que se sale de lo típico visto por estos lares: historias de chicas que se enamoran a primera vista del guaperas de la escuela y pasadas algunas vicisitudes son felices y comen perdices. En este manga esa bonita fantasía queda atrás y cuenta situaciones más cercanas a la mayoría de la gente, pues muy pocos son los que encuentran el amor de su vida a la primera y han de encadenar romances hasta encontrar la felicidad de alguna manera. De todas maneras, se pueda sentir o no el lector identificado con los personajes, va a pasar un buen rato leyendo la historia, objetivo de la misma. Y por ello merece la pena dedicarle algo de tiempo.