Hace unos días Manganews publicaba la entrevista que le hizo al mangaka Takehiko Inoue (Vagabond, Real, Slam Dunk, Buzz Beater) cuando viajó esta primavera a París para asistir a la Feria del Libro. Como resultó ser un texto harto interesante y por si tenéis dificultad con esa lengua, o sois demasiado vagos como para intentar entenderla, aquí os reproducimos la entrevista en perfecto castellano. Disfrutad:
Vuestro último título publicado en Francia es Pepita. Esta historia se centra en el arquitecto catalán Antoni Gaudí, a quien usted quiso rendir homenaje tras su viaje a Barcelona en 2011. ¿Que aprendió de este artista?
Estudiando las obras y las construcciones de Gaudí, no sentí ningún sentimiento específico, pero de forma general tuve la impresión que este hombre consiguió transcribir a partir de elementos de la naturaleza emociones que los humanos no sienten normalmente, mediante un estilo propio. Los edificios de Gaudí emiten una cosa que no he logrado encontrar en otros arquitectos.
Usted está en París, una ciudad conocida por su arte y su historia ligada a él, con sus múltiples museos… ¿Ya ha hecho turismo? ¿Qué es lo que le ha gustado más?
De hecho, llegué ayer (era miércoles 20 de marzo) y no he tenido tiempo de visitar más que las cercanías de mi hotel. Y por el contrario de lo que la mayoría de la gente piensa, no soy muy versado en arte (ríe).
¡Es verdad que mucha gente lo cree! (risas).
Aún así, ¡no me creo que no tenga ningún interés por el arte! Por ejemplo, me encantaría visitar el museo del Louvre… ¿Me podrías recomendar otros sitios a visitar?
El museo de Orsay es magnífico, ¡yo se lo recomiendo!
Gracias por el consejo! (risas)
Hemos podido leer en una antigua entrevista que usted pensaba en reanudar el manga de Slam Dunk algún día. ¿Aún tiene este proyecto en mente?
Sí, esta idea aún me ronda por la cabeza, pero no quiero presionarme con este proyecto. De momento, pretendo sentirme realmente dispuesto a seguir con Slam Dunk antes de lanzarme con él, y hoy en día aún no se da el caso.
Durante la publicación de Slam Dunk, la popularidad del baloncesto en Japón aumento considerablemente. 17 años más tarde, ¿el baloncesto aún sigue siendo tan popular en vuestro país?
Después del fin de la serie, desgraciadamente la popularidad del baloncesto en Japón bajó… De hecho, para ver este deporte en la televisión nipona, tienes que tener televisión por cable, que no está al alcance de todos. Además, hace algunos años había equipos del NBA que venían de vez en cuando a hacer partidos de exibición, pero ya no lo hacen, prefieren ir a la China… ¡y esto me entristece mucho!
Sí, esta idea [retomar Slam Dunk] aún me ronda por la cabeza, pero no quiero presionarme con este proyecto. De momento, pretendo sentirme realmente dispuesto a seguir con Slam Dunk antes de lanzarme con él, y hoy en día aún no se da el caso.
Usted es un gran apasionado del baloncesto. Además de las obras Real y Slam Dunk, tengo entendido que estaba a cargo de una sección dedicada a la NBA en la revista Young Jump…
¡Es verdad! Esta sección se llamaba Showtime, y nació dos años antes del debut de Real. Cuando empecé esta ultima, preferí detener la sección y dedicarme a fondo a Real.
De hecho, después de Slam Dunk, un responsable de la Young Jump no paraba de pedirme que dibujara otro manga de baloncesto… Al principio no sabía si era una buena idea, porqué yo estaba trabajando en Vagabond, pero insistió tanto que al final nos pusimos de acuerdo para que yo me ocupara de una seción dedicada a la NBA, ¡pero una cosa llevó a la otra empecé a dibujar Real!
Hablemos de Vagabond… El manga tuvo un largo parón entre 2010 y 2012. ¿Nos puede decir el por qué?
Esta pausa se debió simplemente a problemas de salud. Estaba muy cansado y mi cuerpo no aguantaba más, por eso pedí un descanso a mi editor. Así de fácil.
La condición humana es un tema que usted tiene muy presente, lo hemos visto en Real con los personajes que tienen un hándicap, o través de las preguntas y viajes iniciatorios que tiene Mushashi en Vagabond. ¿Podría usted definir en pocas palabras su visión de la condicón humana?
Mi visión es fácilmente explicable en el caso de Real. Lo que quiero decir es que cualquiera puede caer en la desesperación cuando ocurre algo tan grave como un accidente, por ejemplo. Pero es cuando se toca fondo cuando podemos encontrar la fuerza para levantarnos, de continuar viviendo, de lograr salir de los golpes del destino, cuando podemos aprender de estas experiencias, aunque nos lo hayan quitado todo antes. Esto es lo que quiero transmitir con Real: que nuestra vida no se termina aún cuando alguna desgracia nos ocurre.
También tenemos la impresión, principalmente en Real, que para seguir adelante los personajes se apoyan mutuamente…
Sí, es verdad. En la vida de cada día siempre hay gente que sufre graves accidentes y que se encuentra de repente en la cama de un hospital, desesperada. Tenemos la impresión que estas cosas solo ocurren en las películas o a los otros, que es imposible que nos ocurra a nosotros. Pero cuando nos llega, siempre podremos encontrar una persona que ha pasado por lo mismo y hablar sobre ello para reconfortarnos, encarar a esta realidad que puede ser cruel.
Es por eso que le ha dado ese título a Real, ¿por que parece que la serie refleja la realidad?
Para ser honestos, fue mi responsable editorial quien pensó en el título para este manga (risas).
Es una palabra que utilizó mucho durante nuestros encuentros, y es por eso que pensó utilizarlo como nombre de la obra.
Tinta china, lápices, pintura, caligrafía, iPad y dibujos con tiza a lo largo de estos 10 años… usted ha utilizado numerosos utensilios para experimentar su talento artístico. ¿Hay alguna otra técnica que le gustaría dominar?
Efectivamente, un día sentí la necesidad de aprender a dibujar con otros instrumentos. Hoy en día quiero dibujar con los objetos de la natura que nos rodean… Por ejemplo, he visto gente en China que utiliza el agua para dibujar en el suelo, o hacen dibujos grabados en piedra.
Después de muchos años, vuestra reputación ha traspasado la de simple mangaka y ahora ya es considerado un verdadero y completo artista, que es reflejado por su interés en el arte. ¿Qué le empujo a ir más allá del manga? ¿Fue algún click (gracias a una obra o un artista en concreto)?
No hay ningún evento en particular en mi vida personal que me haya empujado a tener este interés, es más bien mi trabajo como mangaka. Por ejemplo, Real. Hice esta obra sin salir de los limites de mi profesión. En Vagabond, mi enfoque es diferente. Yo quería desacerme de los límites de un manga y hacer otras cosas de las que hacía habitualmente. Vagabond es un terreno que me sirve para experimentar nuevas cosas, y esto es sin duda gracias a que me abro poco a poco a otras vías artísticas.
Usted tiene una carrera muy rica y diversa, y un gran reconocimiento de público y crítica. Mirando atrás, ¿qué piensa usted de ella? ¿Y qué aventuras le gustaría explorar en el futuro?
Estoy realmente contento con mi carrera de mangaka, y de las obras que he hecho. Probablemente porqué fui capaz de producir todo lo que quise, y nunca he tenido unos límites particulares. A este nivel yo estoy muy contento con mis 25 primeros años como mangaka (ríe).
Referente al futuro, no me gusta mucho proyectarme en un futuro, prefiero concentrarme en mi trabajo actual y dar lo mejor de mi mismo. No tengo visión, ni a medio, ni a largo plazo de lo que haré más adelante.