Primeras impresiones de Simon Sues

simonsuesvol1sCuando hablas de Simon Sues no puedes ser lo suficientemente directo como para no hacer un inciso en lo que rodea la llegada de este cómic de marcado origen koreano. Simon Sues es, entre otras cosas, el primer título de una nueva editorial afincada en AsturiasMilky Way –que así se llama– apuesta por un webcómic publicado originalmente en la página de habla inglesa Mangamagazine, y dónde ya podemos encontrar algunas de las obras que la nueva editorial tiene anunciadas. Por ahora es pronto para discernir el rumbo que acabarán cogiendo los asturianos dentro de unos meses, pero sí que podemos decir que, por lo que les toca, han hecho un buen trabajo con este primer volumen recopilatorio.

El tomo cuenta con unas calidades de papel y sobrecubierta nada desdeñables, aunque tampoco nada atípico. La pega que nos podemos encontrar ahora mismo es la distribución del título, que por el momento está un poco en el aire, aunque podemos hacernos con él en su tienda online.

Centrándonos ya en las páginas de la obra nos encontramos con un guión no demasiado innovador en el que todo parece ir demasiado deprisa, o por lo menos esa es la impresión que me ha dado su lectura. Tiene algunos momentos impactantes que la autora, de haber sabido administrar mejor el tiempo entre los movimientos de los personajes, podría haber explotado mucho más, pese a que dichas escenas ya son disfrutables. Simplemente podrían haberlo sido más.

Desde el primer momento se nos presenta de forma sencilla a Simon, el protagonista, y a Isaac, el escudero de éste. Un dúo de personajes que hacen las veces del Sherlock y el Watson de turno. Tópico que al menos todavía parece funcionar de manera eficiente, y es que si en este primer tomo se nos dan unas pinceladas sobre la relación de ambos, da la impresión de que la relación de estos será el eje sobre el que giren pequeñas historias autoconclusivas (en este tomo vienen dos) acerca de las aventuras que vive Simon como abogado demoníaco. Porque resulta que el protagonista de la obra, aparte de regentar una tienda de antigüedades tras haber dejado la universidad, se dedica a ayudar a los humanos que quieren romper el contrato que hicieron con los demonios, que aquí se nos presentan bajo el nombre de fiends.

Probablemente estaréis pensando que se asemeja demasiado a obras como Defense Devil, donde un abogado de mismas características hacía frente a los demonios que se le ponían por delante intentando perjudicar a los humanos. Y aunque es cierto que a primera vista tienen una idea base muy parecida, luego Simon Sues se desmarca ya no solo de la mentada Defense Devil, sino del shônen de batallas puro, presentándonos unas resoluciones a los casos dialéctica y apaciguada, uno de los puntos favorables de la obra y que la desmarcan de otras historias de corte similar.

Otro factor importante es el dibujo, ya que a los que nos gustan las obras con el dibujo lo más limpio posible se nos puede hacer en un primer momento algo cuesta arriba, ya que la autora aglutina tramas por doquier en pos de darle veracidad a un dibujo ya de por sí de tintes realistas (que hará las delicias de aquellos que sí disfrutan de estos estilos), todo en conjunto con unos trazos que quieren dar la impresión de descuidados pero que en cierta manera mejoran el estilo de dibujo, haciendo de él algo más dinámico. También tenemos que tener en cuenta que pegándole un vistazo a las páginas más actuales el dibujo se vuelve mucho más ordenado y aseado, encontrando un equilibrio mucho más adecuado.

Una obra con un primer tomo correcto que gustará en especial a los que buscan una obra detectivesca con toques fantásticos.